|
Vínculos con la naturaleza Las esculturas de Robert Harding se inspiran tanto en la naturaleza como en el legado de la vanguardia histórica. Escultura. Robert Harding. Sociedad Económica de Amigos del País. Málaga. Plaza de la Constitución, 7. Hasta el 7 de abril de 2001. Con
motivo de la anterior exposición individual de Robert Harding (Birmingham,
Reino Unido, 1951) en la provincia de Málaga, hace poco más de un año, me
refería yo en estas mismas páginas a las principales fuentes de inspiración
de sus obras: ciertas culturas autóctonas africanas, el mundo de la naturaleza
primigenia y la vanguardia artística del primer tercio del siglo veinte. En
este sentido, resulta interesante comprobar un doble movimiento recíproco que,
al mismo tiempo, evidencia una profunda fidelidad a las raíces culturales
propias: de un lado, el artista nacido en Europa, viajero asiduo, de En los meses transcurridos entre una exposición y otra, pueden advertirse al menos tres innovaciones en las obras de este escultor británico afincado desde 1978 en la comarca malagueña de la Axarquía: en primer lugar, el abandono de materiales como el plomo y la madera de olivo y de iroko, así como prácticamente del hierro y del hormigón, para ceñirse al empleo del zinc, que continúa usando para realizar las caras y superficies de los objetos, del estaño, que sustituye ahora al plomo en las soldaduras, y del alambre; en segundo lugar, la escala, que ha aumentado notablemente de tamaño, con obras incluso de cuatro metros, lo que les proporciona una rotunda monumentalidad; en tercer término, las formas, estilizadas, aéreas, ligeras y gráciles en casos como los de From me to you, Before y Eve’s leaf, más pesadas, estáticas y volumétricas, también más enigmáticas y ancestrales en piezas como I’ll show you mine y Tickle me, realmente espléndidas. Aunque los elementos más recientes están relacionados con los gruesos hilos de alambre que, a modo de filamentos o de espaciadas pilosidades, brotan del opaco metal, otorgando unas veces a las piezas un simbolismo agrícola y vegetal y otras erótico y sexual. ©Enrique Castaños Alés Publicado originalmente en el diario Sur de Málaga el 2 de abril de 2001
|